Tejas de arroz

Elaboración

• Comenzamos nuestra receta de tejas de arroz cociendo el arroz en la leche de avellanas y licor, durante 20 minutos. Después lo dejamos enfriar.

  

• Mezclamos la mantequilla fría, junto con la canela, la harina de arroz y el azúcar, y amasamos hasta homogenizar. Luego le agregamos el arroz.

  

• Disponemos entre dos papeles de horno la mitad de la masa, extendemos con ayuda de un rodillo hasta hacer una capa fina de masa. Horneamos a 180º C durante 10 minutos, quitamos el papel de encima y horneamos otros 5 minutos, retiramos.

• Cortamos la masa en tiras, inmediatamente, y la dejamos enfriar sobre una rejilla. A las tiras, les damos la forma de las tejas antes de que se enfríen totalmente. ¡Y listo, a disfrutar!

Una merienda con encanto

Tienes la ocasión ideal para organizar una merienda especial. Invita a tus amigos a tomar café o té y sácale el mayor partido a tu lado repostero. Para ello, saca tu juego de tazas y prepara una bandeja con los dulces que vayas a servir. ¿Quieres variar con otra receta, aparte de las tejas? Prueba estas croquetas de arroz y cautiva el corazón de tus invitados. Dale un toque chic y goloso a tu merienda.

Prepara un té negro con leche o un café capuchino y colócalo todo para hacer de esa merienda una ocasión especial.

Trucos y curiosidades

Innova en la cocina

Las tejas son un dulce popular de nuestro país, hechas a base de almendra. Son un dulce muy tradicional de Tolosa, pero están muy extendidas por toda España. Y aunque es fácil encontrar tejas en pastelerías y tiendas especializadas, ¿por qué no innovar en la cocina? Sorprende a tus invitados con esta maravillosa versión de arroz. ¡Pon un toque original en tu cocina! ¿Quieres seguir innovando? Échale un vistazo a esta receta de arroz con leche de avena, muesli y frutos rojos.

Azúcar moreno

¿Aún no lo has introducido en tu dieta? El azúcar moreno se obtiene a partir de la caña de azúcar sin pasar por el proceso de refinado, obteniendo un color dorado, que adquiere al evaporarse su contenido de agua, quedando los cristales de azúcar. Es genial para emplear en repostería y tomar con el café. Además, como no ha sido tratado, es mucho más sano. Es rico en vitaminas y ayuda a que mente y cuerpo se fortalezcan.