Risotto de remolacha

Elaboración

• Preparar los ingredientes para una cocción perfecta

  Antes de ponernos con la cocción, es importante tener todos los ingredientes listos para que el proceso sea fluido y el resultado sea impecable. Comenzamos con la remolacha. Si utilizas remolacha cocida, solo tendrás que triturarla hasta obtener un puré homogéneo y reservarla. Si optas por remolacha fresca, hiérvela en agua con sal hasta que esté tierna, pélala y tritúrala.

  Seguimos con la cebolla, que debe estar bien picada en brunoise para que se integre a la perfección en el sofrito. Mide los 300 g de Arroz SOS Especial Risotto, que gracias a su capacidad de absorción de líquidos y liberación de almidón, te ayudará a conseguir la textura cremosa que caracteriza este plato.

  El queso es un elemento clave en el risotto, y si quieres explorar otras opciones además del parmesano, te recomendamos consultar esta guía sobre los mejores quesos para un risotto, donde descubrirás alternativas que también pueden aportar cremosidad y sabor.

  Por último, calienta el caldo de verduras y mantenlo a fuego bajo para que esté caliente al incorporarlo al arroz. Así evitarás cortes en la cocción y garantizarás un risotto con la textura perfecta.

  

• Sofreír la cebolla y nacarar el arroz para potenciar el sabor

  En una cazuela amplia, calienta un chorrito de aceite de oliva virgen extra a fuego medio. Añade la cebolla picada y sofríela con calma, removiendo de vez en cuando, hasta que esté tierna y ligeramente transparente. Este paso es clave, porque una cebolla bien pochada aporta profundidad de sabor al risotto.

  

  Cuando la cebolla esté lista, incorpora el Arroz SOS Especial Risotto y remueve constantemente. Este proceso, conocido como «nacarar», permite que los granos se impregnen del sofrito y adquieran un brillo translúcido. Así, el arroz absorberá mejor los líquidos y liberará su almidón de manera controlada, logrando esa textura melosa tan característica.

  

  Una vez el arroz esté bien nacarado, vierte el vino blanco y sube ligeramente el fuego. Deja que se evapore el alcohol mientras sigues removiendo, para que el arroz absorba todo el aroma y sabor del vino.

  

• Incorporar el puré de remolacha y cocinar el risotto paso a paso

  Con el arroz ya nacarado y el vino evaporado, es el momento de empezar a darle esa intensidad de sabor y color tan característica de la remolacha. Añade un primer cazo de caldo caliente y remueve suavemente para que el arroz comience a absorberlo. A continuación, incorpora el puré de remolacha reservado y mézclalo bien con el arroz. En este punto, verás cómo los granos comienzan a teñirse de un tono vibrante, convirtiendo el risotto en un plato tan vistoso como delicioso.

  

  Continúa con la técnica clásica del risotto: añade el caldo poco a poco, un cazo cada vez, removiendo constantemente para que el arroz libere su almidón y la textura se vuelva cremosa. Es un proceso gradual, donde la paciencia y la constancia marcan la diferencia. Mientras cocinas, ajusta el punto de sal al gusto, teniendo en cuenta que el queso parmesano añadirá un extra de sabor al final.

  Sigue añadiendo caldo y removiendo durante unos 18-20 minutos, hasta que el arroz esté en su punto, con una textura melosa y envolvente. ¡El resultado valdrá cada minuto de espera!

  

• Finalizar con la mantequilla y el queso para una textura cremosa

  Cuando el arroz haya alcanzado su punto ideal de cocción, incorpora la mantequilla en trozos y el queso parmesano rallado. Remueve suavemente hasta que ambos ingredientes se integren por completo, aportando una textura sedosa y un extra de sabor al risotto.

  Si quieres un toque de contraste, puedes añadir una pizca de sal y pimienta al gusto. Este es el momento en el que el risotto alcanza su máxima expresión: cremoso, lleno de sabor y con un color increíble gracias a la remolacha.

  

• Reposar y decorar para un acabado perfecto

  Apaga el fuego y deja reposar el risotto durante un par de minutos para que los sabores se asienten. Mientras tanto, toca darle el toque final. Sirve el risotto en platos hondos y decóralo con piñones tostados, unas lascas de queso parmesano y un poco de cebollino fresco picado.

  Este risotto de remolacha no solo es un espectáculo a la vista, sino también un plato lleno de matices que sorprenderá a todos. ¡Hora de disfrutar!

  

Un risotto de remolacha que conquista a primera vista y al primer bocado

Más allá de su atractivo color y su sabor envolvente, este risotto de remolacha es una excelente forma de incorporar más verduras a la alimentación sin renunciar al placer de un plato cremoso y reconfortante.

Tal y como señala la nutricionista María Rodríguez Lazo “el arroz aporta hidratos de carbono complejos que proporcionan energía de calidad, mientras que la remolacha contribuye con fibra y vitaminas esenciales para el bienestar del organismo.”

Si te ha conquistado este risotto, no te pierdas otras opciones llenas de sabor y equilibrio. Disfruta del risotto frutti di mare para un toque marinero o del risotto carbonara si buscas una versión con una cremosidad inigualable.

¡Déjate sorprender y sigue explorando el mundo del risotto!