Bulgogi: carne de ternera al estilo coreano

Elaboración

• Preparación de la carne marinada

• Comienza tu aventura culinaria seleccionando una carne de ternera de alta calidad y córtala en tiras finas para facilitar la absorción de la marinada y asegurar una cocción uniforme. En un recipiente grande, combina las tiras de carne con salsa de soja, aceite de sésamo, azúcar moreno, incorpora un poco de kiwi rallado. Aunque tradicionalmente se usa pera asiática para suavizar la carne, el kiwi es una excelente alternativa por sus enzimas naturales que ayudan a ablandar la carne mientras añaden un sutil dulzor. Agrega la zanahoria, la cebolla, salpimenta y añade el ajo tierno.

  Mezcla todos los ingredientes hasta que estén bien integrados, asegurándote de que cada pieza de carne esté bien cubierta con la marinada. Cubre el recipiente y refrigera por al menos dos horas, aunque marinar durante toda la noche potenciará aún más los sabores.

  

• Cocción del arroz SOS

• Mientras la carne se está marinando, es el momento perfecto para preparar el arroz, un acompañamiento clásico para el bulgogi. Utiliza arroz SOS Especial Kamâlis, conocido por su capacidad para absorber sabores y su textura perfecta que complementa platos ricos en salsa. En una cacerola mediana, calienta un poco de aceite de sésamo y añade el arroz, tostándolo ligeramente para infundirlo con un sabor a nuez antes de añadir agua y déjalo cocinar durante 10 minutos. La proporción adecuada y el tiempo de cocción garantizarán que cada grano quede suave y esponjoso.

  Una vez que el arroz esté cocido, déjalo reposar con la tapa puesta para que el vapor termine de suavizar los granos. Este método ayuda a que el arroz mantenga su integridad sin aglomerarse, haciendo que cada cucharada sea un deleite junto con la carne marinada. Reserva el arroz y manténlo caliente mientras procedes a cocinar la carne.

  

• Cocinado de la carne marinada

• Calienta una sartén grande o un wok a fuego alto. Una vez caliente, añade la carne marinada, escurriendo cualquier exceso de líquido antes de colocarla en la sartén. El secreto está en cocinar la carne rápidamente a alta temperatura para caramelizar los azúcares de la marinada, creando así un exterior ligeramente crujiente mientras el interior permanece tierno y jugoso.

  Evita sobrecargar la sartén para asegurar que cada pieza de carne se dore uniformemente y no se cueza al vapor. Este paso debería tomar solo unos minutos por lado, dependiendo del grosor de las tiras de carne. Una vez que la carne esté bien dorada y cocida al punto deseado, retírala del fuego y resérvala, manteniéndola caliente.

  

• Emplatado del plato final

• Para servir, crea un contraste visual y de texturas colocando el arroz blanco cocido de un lado del plato y la carne bulgogi caliente del otro. Esta presentación no solo es estéticamente agradable, sino que permite a los comensales disfrutar del sabor intenso de la carne y la suavidad del arroz por separado o mezclados, según prefieran.

  Finalmente, decora el plato esparciendo semillas de sésamo sobre la carne y añadiendo un poco de cebolleta o cebollino fresco picado. Con estos pasos, has creado un bulgogi auténtico y delicioso que seguramente impresionará a cualquier amante de la cocina coreana. ¡Qué aproveche!

  

Conclusión

El bulgogi, con su rica combinación de sabores y su técnica de cocción única, es más que un simple plato: es una experiencia culinaria que celebra la tradición y la innovación de la cocina coreana. Al seguir estos consejos y técnicas, no solo garantizas la autenticidad del sabor, sino que también adaptas este clásico para disfrutarlo en cualquier hogar.

Invitamos a todos a probar esta receta, asegurándose de utilizar los mejores ingredientes y disfrutar de cada paso del proceso. ¡Anímate a experimentar y personalizar tu bulgogi, haciendo de cada comida una ocasión especial!