Después de un intenso año escolar llega una de las épocas favoritas de los niños, el ansiado verano. Es el momento de que desconectes un poco y aproveches el buen tiempo para divertirte con ellos, y es que hay muchos planes con niños muy originales que puedes hacer estas vacaciones.
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Campamentos de lo más originales
Seguro que tus padres te apuntaron de pequeño a algún campamento que esperabas como agua de mayo. ¿Quién no guarda grandes recuerdos de amigos inseparables de esa época? Pues los campamentos siguen estando en el top de las mejores experiencias para los niños.
Claro que los campamentos a los que a ti te apuntaban no eran ni la mitad de originales de los que existen hoy, y es que tu madre se echaría las manos a la cabeza si le dijeras que quieres apuntar a su nieto al circo. Como #NoTienesQueSerTuMadre, tus hijos pueden ser acróbatas en potencia con los talleres del Teatro Price, convertirse en Indiana Jones en el Museo Arqueológico, emular a su jugador de fútbol favorito en los campus del equipo de la ciudad o sacar provecho a su afición por los videojuegos con el Camp Tecnológico. Tu cantabas al ritmo de la guitarra del monitor, ellos pueden dar verdadera rienda suelta a su pasión musical en campamentos como el EnClave de Sol y hasta convertirse en artistas por un día con los talleres de museos como el Thyssen. ¡Confiésalo! Te encantaría volver a tener 12 años para poder disfrutar tanto como ellos.
Festivales para toda la familia
Los festivales de verano no son solo para los modernos, hay muchas propuestas para que los disfrutes con tu hijos y que descubran la emoción de la música en directo.
- En Lugo se celebra el Resukids para que vivan toda la experiencia festivalera desde dentro.
- En Pedralbes tenemos el SoundEat!, música en jardines con muchas actividades.
- El Rototom en Benicássim es un espacio de juego y experimentación creativa en familia.
Además, entre foodtruck y foodtruck, puedes aprovechar sacar el táper con recetas sencillas pero muy nutritivas como una ensalada campera con arroz o de arroz y mejillones que dan la energía necesaria para seguir el ritmo festivalero…y el de los niños.
Disfrutando al aire libre
La de veranos que te pasaste en el pueblo, donde lo pasabas en grande jugando con los primos a cualquier cosa o chapoteando en ríos y pantanos. Y es que lo de sentirte Orzowei te molaba un montón. Así que no dejes que tus hijos se pierdan esa sensación de estar en contacto con la naturaleza aunque estéis en la ciudad. Por ejemplo, hay talleres naturales en parques urbanos como El Retiro o la Dehesa de la Villa en Madrid, o la Ludoteca Ambiental del Parque de la Ciutadella en Barcelona.
¿Recuerdas cómo te encantaba jugar durante horas en el agua? Tu madre no veía el momento de sacarte de la piscina, playa o pantano mientras que a ti se te ponían los dedos más arrugados que a la abuela. Si no hay playa cerca de casa no hay problema, las piscinas y fuentes naturales, como las Presillas en Rascafría o las Chorreras en Cuenca, son incluso mejores. Olvídate de pelearte por un hueco en la arena para poner la sombrilla y despreocúpate de perder a los peques entre las olas.
Tanto chapotear abre el apetito, ¿y si organizas un picnic en plena naturaleza para recargar las pilas? Una buena paella o una barbacoa, siempre en entornos habilitados, son el colofón perfecto para un día de quemar energías a remojo. Con recetas como la paella de arroz y verduras o esa receta de arroz con verduras de tu madre no tienes que complicarte mucho. Vale, probablemente tendrás que lidiar con hormigas, pájaros gorrones y demás fauna veraniega, pero admítelo, es parte del encanto de la naturaleza. Y si no, siempre las puedes preparar en casa y llevártelas listas para comer.
Cocina con niños en verano
No te sientas mal si lo último que te apetece es encerrarte en la cocina a preparar la comida o la cena con toda la familia revoloteando por casa. Da la vuelta a la tortilla a la situación y que sean los niños los que cocinen. Puedes convertir la cocina en un juego con el que aprenderán a valorar mejor la comida y a probar sabores nuevos. Seguro que dejarán limpio un plato de salteado de arroz con guisantes y jamón o de berenjenas rellenas si ellos han sido los chefs ese día.
No te compliques con elaboraciones ultracomplicadas, en verano lo mejor es rendirse a recetas rápidas y sencillas que podemos incluso llevar de táper a la piscina. El arroz les encanta, no solo para hacer manualidades. Los platos con arroz son la manera más fácil y rica de empezar, por ejemplo con salteados o ensaladas llenas de colores. ¡Anímales a añadir lo que más les apetezca y deja salir al pequeño chef que llevan dentro! Y no te agobies por el orden o la limpieza, se trata de pasarlo bien y un poco de pringue no hace daño si la ocasión lo merece. Ayudar a recoger y limpiar también puede ser otro juego, ¿o acaso no le funcionó a Mary Poppins?
Cantar, pintar, hacer malabares, chapotear, cocinar… de ti depende que viváis un verano inolvidable lleno de actividades estimulantes. Solo tienes que decidirte por alguno de estos planes con niños muy originales y disfrutar a tope de vuestro verano juntos.
